Representantes de los tres niveles de gobierno, como la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), el Gobierno del Estado de Tamaulipas, el Municipio de Nuevo Laredo y su Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA), así como los organismos internacionales encabezados por la Sección Estadounidense de la Comisión Internacional de Límites y Aguas, (IBWC) y el Banco de Desarrollo de América del Norte (NADBank), firmaron un Acuerdo de Compromiso para gestionar de manera expedita los recursos para el proyecto integral de alcantarillado y saneamiento de la Ciudad de Nuevo Laredo, con el cual se buscará eliminar las descargas residuales sin tratamiento al río Bravo y preservar la fuente principal de suministro de agua potable para las generaciones futuras de ambos Laredos y las comunidades aguas abajo en México y Estados Unidos.
En la firma del Acuerdo estuvieron presentes, Américo Villarreal Anaya, Gobernador del Estado de Tamaulipas, Carmen Lilia Canturosas Villarreal, Presidenta Municipal de Nuevo Laredo, Bob Dahlke, Cónsul General Interino en el Consulado General de Nuevo Laredo en representación de la Embajada de los Estados Unidos en México, Víctor Treviño, Mayor de Laredo, Texas, Salvador López Córdova, Director Ejecutivo de Asuntos Ambientales del NADBank, José Gutiérrez Ramírez, Gerente de Ingeniería y Asuntos Binacionales del Agua de la CONAGUA y María Elena Giner, Comisionada de IBWC.
Se buscará eliminar las descargas residuales sin tratamiento al río Bravo y preservar la fuente principal de suministro de agua potable
Entre las obras a realizarse, destaca la rehabilitación de la Planta Internacional Tratadora de Aguas Residuales (PITAR), que pasará de tratar actualmente 600 a 1,360 litros por segundo (lps) en cumplimiento con la NOM-001-SEMARNAT-2021, así como el reemplazo de redes de alcantarillado sanitario y sistemas de recolección antiguos y deteriorados y la ampliación del sistema de alcantarillado a zonas que actualmente carecen del servicio.
El Director Ejecutivo de Asuntos Ambientales de NADBank, Salvador López Córdova, comentó que “estas importantes obras contribuirán no solo a mejorar la calidad del agua descargada al Río Bravo, protegiendo esta importante fuente de agua binacional, si no además protegerán la salud pública, el medio ambiente y la calidad de vida de los habitantes de ambos lados de la frontera”.
Cabe resaltar que el proyecto recibirá, a través del NADBank, importantes aportaciones en recursos no reembolsables del Fondo de Infraestructura Ambiental Fronteriza, que opera con fondos de la Agencia de Protección Ambiental de los EE. UU. y son equivalentes al 27% de la inversión.
