El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha agradecido la disposición de Tesla por abrir una fábrica de coches eléctricos en México, pero ha considerado que la opción de Nuevo León, fronteriza con Estados Unidos al norte, no es adecuada por su "falta de agua".
"Hay ya lugares en el país donde no se tiene agua suficiente y tenemos que cuidar el agua para consumo doméstico, y uno de los Estados que tiene problemas por falta de agua es Nuevo León", ha afirmado López Obrador.
El líder mexicano ha sugerido la otra opción en liza del Estado de Hidalgo como alternativa por estar cerca del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, infraestructura prioritaria para la Administración Obrador. También ha mencionado el sur del país por concentrar "el 70% del agua" y como forma de "mantener a la población" fijada al territorio.
El mandatario ha explicado que la escasez del agua en el norte no se debe solo a la presencia de la industria, sino a la población que atrae para trabajar en ella y que incrementa el estrés hídrico de los acuíferos.
Estas declaraciones se han producido después de que el gobernador de Nueva León, Samuel García, del socialdemócrata Movimiento Ciudadano, diera por hecho la llegada de la factoría a su región.
Sin embargo, López Obrador ha considerado que "debe haber una planificación nacional", y ha adelantado que él mismo hablará con los directivos de Tesla sobre la situación, mientras instará a su secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y al secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, a entablar también conversaciones con la empresa norteamericana para identificar un emplazamiento más adecuado.
